Filiberto
Martínez: “En ningún sitio hay un público tan sensible y tan cariñoso como en
Murcia”
El
novillero ha cortado esta temporada 34 orejas y un rabo
MURCIA. Remitido.- Club Taurino de Murcia. Crónica ''Martes Taurino'' 30 Octubre 2012. El novillero revelación
Filiberto Martínez, de Calasparra aunque adscrito a la Escuela de Albacete,
dijo hoy en el Club Taurino de Murcia que en ningún sitio se ha encontrado una
afición “tan sensible, tan cariñosa y también tan entendida como en Murcia”.
Martínez, que participó en el Martes Taurino junto a su
apoderado, Gonzalo González, ha toreado este año 23 novilladas, dos de ellas en
Albacete y la que se celebró en Murcia en la pasada Feria de Septiembre. El
balance, como recordó Antonio González Barnés, que dirigió la tertulia a tres
bandas, es “inmejorable”, con 34 orejas, dos en Murcia, otras dos en Jerez y
tres y un rabo en Calasparra, además de un indulto en la plaza francesa de
Nimes.
Para Barnés, que reivindicó para el novillero el nombre
artístico de “El Fili”, éste se está labrando una carrera “con modestia, sin
frecuentar círculos taurinos mal construidos y haciendo lo que le gusta hacer,
torear”, al tiempo que vaticinó su debut el año próximo con caballos. “Ha sido
el novillero revelación, el mejor novillero sin caballos de la Feria y uno de los
que hace posible que esta llama de la Fiesta no se apague nunca, porque
mientras haya un toro bravo en la dehesa y un chaval con ganas no se acabará”,
manifestó en su exposición el director del portal taurino “El Muletazo”.
Filiberto recordó al hilo de las reflexiones sobre su
temporada la tarde en la que indultó un novillo de Salvador Domecq y abrió la
Puerta de los Cónsules. “Era mi primera vez en Francia, no me lo esperaba.
Monté dos veces la espada y el público no me dejó entrar a matar. Fue algo
precioso”. El novillero reivindicó además la plaza de su pueblo, “porque
Calasparra es una plaza importante y tiene su personalidad” y recordó que su
afición no le nació allí, sino en las visitas que hacía a un tío abuelo suyo
que tenía una ganadería en Toledo. “Allí iba en verano y fue a raíz de esas
visitas que empecé a interesarme por los toros”, contó.
“El Fili” tuvo palabras de sentido agradecimiento hacia
el ganadero Pedro Merenciano, presente en el Martes Taurino y toda una
institución en el mundo del toro, no en vano por su finca han pasado a tentar
todos los murcianos que han vestido y visten el traje de luces.
El joven novillero, de 18 años, no tiene prisa en su afán
por triunfar. “Me gustaría ser figura, pero me queda mucho que aprender. A
veces me veo en vídeos y no me gusto. Quiero ser un buen torero, pero soy
consciente de que lograrlo es casi un milagro, aunque trabajando mucho se puede
conseguir”. Y se fija en lo más alto del escalafón a la hora de buscar
referentes. “Es imposible ser más que José Tomás, como torero y como persona”,
sentenció.
Por su parte, Gonzalo González, apoderado que hasta hace
algunos meses compaginaba a Filiberto con Miguel Tendero, dijo que el novillero
“quiere ser torero y me ilusionan su gusto, sus ganas de aprender y su valor.
Trabaja muy bien porque tiene mucha afición”, comentó. “En invierno le toca
entrenar y hacer campo y en 2013 empezará despacio pero con firmeza con el
objetivo de debutar con caballos”, explicó González, quien subrayó la evolución
de Filiberto “con el capote, la espada, con todo en general, teniendo en cuenta
que sólo se ha dedicado plenamente a los toros en el último año y medio”.
Cuando se dio paso a las intervenciones del público tomó
la palabra el novillero Samuel Rodríguez, que siguió el Martes Taurino junto a
Juan Francisco Fernández de la Torre, ambos de la Escuela Taurina de Murcia.
Rodríguez felicitó a Filiberto por su éxito y manifestó su deseo de torear
junto a él. También el presidente del Club Taurino de Calasparra, Francisco
García, recordó cómo descubrió al novillero, “cuando apenas se había puesto una
o dos veces y ya transmitía algo”. Y se sumó asimismo a las palabras de elogio
Jesús Béjar, de Tentadero Murcia.
El próximo Martes Taurino contará con una voz inédita, la
del jefe de Cirugía de las plazas de Murcia y de Calasparra, Ricardo Robles.