José María Manzanares triunfador por trofeos cortados (4or), salió a hombros acompañado de su hermano Manuel Manzanares y de Enrique Ponce.
ALICANTE. Miércoles, 24 Junio 2015. -5º Festejo y último de la Feria de Hogueras- Texto.- José María Jericó. Fotos.- Benito Sánchez Leyva. La última corrida del ciclo sanjuanero en la que se
rendía un emotivo homenaje al maestro ‘Manzanares’ constituyo todo un exitoso acontecimiento lleno de emociones
y recuerdos. Nada más romperse el paseíllo y a los acordes del himno de
Alicante, toreros, empresa, familiares, autoridades y el alcalde acompañado por
las ‘Bellezas del Fuego’ se hicieron presentes en el ruedo para acompañar a los
hijos del maestro en tan solemne momento que el publico siguió desde sus
asientos puesto en pie.
La tarde, dado el acontecimiento, salio redonda. Es
indudable que el espíritu del maestro estaba
presente y ayudo para que todos
triunfaran. Abría el cartel de esta corrida mixta el benjamín de la familia Manuel
Manzanares, que rejoneo un ejemplar sin fuerzas del hierro de Bohórquez. Anduvo
bien con Farruquito y Garibaldi en la colocación de banderillas arriesgando al
clavar en corto. Mato al tercer intento y preciso del descabello. Saludo una
ovación. Al segundo de su lote, un toro con más presencia y clase, lo toreo con
temple y torería, manejando con efectividad sus monturas, especialmente con Príncipe
un tordo rodado precioso con el que entusiasmo a la concurrencia. Mato de un
rejonazo certero y le concedieron las dos orejas.
El maestro Enrique Ponce se enfrento a un toro de fuerzas justas, pero su sabia
experiencia hizo que se viniera arriba dándole espacios y tiempo, llevando el
engaño a media altura para no forzarlo. Faena sobre la diestra con mucha técnica
a la vez que inteligente con un brindis al cielo y a las hijas del maestro que
se encontraban en el tendido. Agarro una buena estocada y paseo las dos orejas.
El segundo de su lote un toro que tuvo nobleza aunque al final buscaba las
tablas, Ponce lo toreo sobre ambos pitones con temple y buen ritmo, destacando
las series instrumentados por el lado derecho, término con unas poncinas que gustaron
al público. Dejo un pinchazo hondo que fue suficiente aunque tardo en caer
enfriando una labor en la que podría haberse llevado algún trofeo más, aun así hubo una insuficiente petición y fue muy
aplaudido al dar la vuelta al ruedo.
Una completa actuación tuvo José María “Manzanares”, muy
emocionado todo la tarde al igual que su hermano, cuajo dos buenas faenas. El
primero de su lote que en los primeros tercios se mostró descompuesto y manseó,
lo cuajo con la franela en una emocionante faena en la que templo y alargo la
embestida en varias tandas de derechazos y circulares de largo trazado
rematados con excelentes pases de pecho de pitón a rabo. Mato de una estocada
de efecto fulminante y corto las dos orejas. El sexto que recibió el excesivo
premio de la vuelta al ruedo, fue un toro de excelente condición en la primera
fase de la lidia para luego rajarse a la salida de cada muletazo. Manzanares
toreo con temple y ligazón, dándole adecuados tiempos y distancias, todo muy
medido para enjaretar otra bella faena corriendo bien la franela sobre ambas
manos. De excelente factura fue el toreo con la derecha. Mato de una soberbia
estocada que hizo rodar al toro sin necesidad de puntilla y otras dos orejas
paseo por el albero llevando de la mano a su hijo Josémari, recordando tiempos
pasados en los que su padre hacia lo propio con él. Todo lleno de emoción y
sentimiento en una tarde para el recuerdo en la que salieron los tres por la
puerta grande acompañados del mayoral.
FICHA: Dos toros
de Fermín Bohórquez, nobles pero con poca fuerza y cuatro de Núñez del Cuvillo
que dieron excelente juego. El sexto “Cencerrón” premiado con la vuelta al
ruedo. Manuel Manzanares, ovación con saludos y dos orejas. Enrique Ponce, dos
orejas y vuelta tras petición y José María Manzanares, dos orejas y dos orejas.
Entrada: Más de tres cuartos. Incidencias: Tras parear al sexto se
desmonteraron Curro Javier y Luis Blázquez.