lunes, 5 de abril de 2010

RAFAELILLO: TOREO HEROICO ANTE LOS MIURAS EN ARLES...

RAFAELILLO demuestra su garra en la corrida de Miura en Arles
Ni el murciano, ni Padilla ni Mehdi Savalli lograron arrancarles a sus toros ningún trofeo
PUBLICADO EN www.LAVERDAD.es  05 / Abril / 2010
Por BARQUERITO.
ARLES (Francia). Domingo, 4 de Abril de 2010
LA CORRIDA
En Arles. 6ª de feria. Lleno. Soleado y revuelto. Chubascos en la segunda parte de festejo.
Ganadería. Seis toros de Miura.
Cartel. JUAN JOSÉ PADILLA (de violeta y oro): saludos tras un aviso y ovación. RAFAELILLO (de coral y azabache): silencio y vuelta tras un aviso.
MEHDI SAVALLI (de azul cobalto y oro): vuelta tras un aviso y ovación.
Cuatro de los miuras de la corrida del Domingo de Pascua de Arles tenían cumplidos los cinco años. Dos se llevó Padilla en el lote: un primero de festejo sencillamente monumental, de apabullante presencia, alto de agujas, cárdeno, largo, acaballado pero distinguido....
El cinqueño del lote de Rafaelillo fue segundo de corrida y dio más sustos que confianza: derrotes virulentos, trallazos por las dos manos, ataques por sorpresa, acostones. Un auténtico toro de combate, como se dice en el argot torista de Francia. Rafaelillo lo despachó sin afligirse. La gente se puso de parte del toro, que llenaba la escena. Savalli toreó con asiento, reposo y temple al tercero de la tarde, que bramó mucho y fue, por la mano derecha, algo incierto por mal gobernado....
El quinto, rabón, cabezón, mugidor, castaño, fue algo envenenado: no paró de enredar, desmontó a un picador, sacó la silla de montar por los aires y, si no aparece la providencial mano de Alain Bonijol para tener de las riendas al caballo de su cuadra tan domada, saca al jaco por encima de la barrera. Se acabó llevando el toro una zurra buena en varas.
Rafaelillo se dejó ver y decidió atacar por la vía heroica: las espaldinas en cadena, los abanicos ligados al desplante, muletazos purísimos de repente, sabores de toda especie, emoción desbordante porque todo fue de peligrar la vida del artista, que tenía, sin embargo, fría la cabeza. Sabía Rafaelillo lo que hacía. A capón, en corto y por derecho, una estocada delantera de gran habilidad.

No hay comentarios:

Publicar un comentario