Texto y Foto.- MIGUEL ASÍS. Jueves, 11 de Febrero de 2010
Tras la presentación de Alfonso Avilés, D. Joaquín Cánovas (Profesor de Historia del Cine de la UMU y Director de la Filmoteca Regional) nos contó lo ligado que desde sus inicios ha ido el cine a los toros, debido principalmente a la plasticidad del espectáculo taurino del cual se percataron inmediatamente los primeros realizadores, pues, les daba la oportunidad de poder plasmar con sus artesanales maquinas una historia en la no era necesario un guión, pues la corrida ya lo tiene de por sí, incluso los actores y la tragedia y además despertaba gran interés en el público por la gran cantidad de aficionados que existía en aquella época. Los medios técnicos fueron perfeccionándose y ello permitió que se pudieran hacer películas de mayor metraje y de nuevo en los toros había una mina, y se empezaron a rodar largometrajes como Sangre y Arena, que fue una de las primeras y que fue un regalo de bodas que hizo Marcial Lalanda a su futuro cuñado que era actor. La película fue financiada por Marcial y en ella intervienen como actores el propio torero y su cuñado.
También nos contó el inmenso esfuerzo que supone para las filmotecas recuperar estos films, ya que la mayoría se encuentran muy deteriorados por el paso de los años, pero gracias al empeño de principalmente de la Filmoteca de Valencia y a la colaboración de muchos aficionados, entre los que destacó al Club Taurino de Castellón –que les ha facilitado mucho material antiguo- se han podido recuperar documentos interesantísimos de los cuales ayer pudimos ver una extensa muestra cuya relación se detalla en el programa del acto.
Antología de imágenes taurinas del cine mudo español (1896-1929)Imágenes de: Lumièré (1986), Corrida de Belmonte y Gallito (Valencia, 1914), Sangre y Arena (V. Blasco Ibáñez, 1916), La barrera del 13 (1911), Viva Madrid que es mi pueblo (F. Delgado, 1928), etc...
No hay comentarios:
Publicar un comentario