"No quiero morirme sin ver a El Cordobés". El joven José López Cánovas vio su deseo cumplido, con brindis incluido.
MURCIA. Sábado, 10 de Abril de 2010.
Por EDUARDO RODRIGUEZ -Redactor de TNM.com y colaborador del programa de radio "Tiempo Taurino" de -Solo-Radio MARCA -Región de Murcia.
En cuantas ocasiones hemos escuchado la frase de “EL TOREO ES GRANDEZA” o “ESA ES LA GRANDEZA DEL TOREO”, en infinidad de ocasiones. Muchos ejemplos podrían ilustrar estas dos contundentes afirmaciones, pero en esta ocasión quiero hacer partícipe a todos los aficionados y seguidores de Torosnoticiasmurcia.com, de una efeméride que corrobora estas dos afirmaciones.
Se trata de un “recorte” de la revista “Digame” que fecha del 23 de marzo de 1971, hace ahora prácticamente 39 años. Dice así el titular “No quiero morirme sin ver a El Cordobés”. Afirmación que hacía José López Cánovas, un chaval, enfermo de parálisis, a partir de la cual se puso en funcionamiento la ya mencionada “Grandeza del toreo” para que en la Plaza de toros de Lorca se hiciera realidad el sueño del muchacho.
Así, y como narra la crónica de dicho revistero, ilustrado por el decano de los fotógrafos murcianos Charles, tuvo lugar el acontecimiento en la Plaza de Toros de Lorca.
Comienza la crónica, que pueden disfrutar en las hemerotecas, de la siguiente manera: “Un sucedido tan humano como emocionante recoge la actualidad taurina. Un detalle de la valía de los sentimientos nobles del hombre, aún en los que tienen un doloroso existir, confiada su fe en la caridad de por encima de lo humano. Un sucedido que en este reportaje está documentado con unas fotos emocionantes que exaltan el hecho, donde lo más puro del espíritu humano se dio cita para proporcionar un momento de felicidad al cumplir su ferviente deseo un joven, y como escenario, el españolísimo de una Plaza de Toros……” .
En estos tiempo de ataque a la Fiesta de los toros y búsqueda de razones y motivos que argumenten la defensa de esta afición frente a aquellos que intentan acabar con ella, aquí queda esta muestra de humanidad, generosidad y en definitiva grandeza, de una efeméride que de no haber existido las corridas de toros nunca podría haberse visto cumplida. Que me perdonen todos los defensores de los animales irracionales, pero sobre todos ellos me quedo con el deseo del muchacho José López Cánovas, que una vez hecho realidad su sueño más vale la pena que todos los argumentos de los que atacan esta Bendita Fiesta.
¡¡¡Que vivan los toros, Manuel Benítez "EL CORDOBÉS", la Plaza de Toros de Lorca y el muchacho José López Cánovas !!!, por, en esta ocasión, hacerme sentir orgulloso de mi afición a la Fiesta Nacional,… pese a quien pese.
SI SEÑOR!!!, VIVA LA FIESTA NACIONAL y OLÉ.
ResponderEliminarToni Solano (Cartagena)