Su segundo toro le produjo una cornada de 6 centímetros pero tras ser atendido en la enfermería de la Plazas de Toros abandonó la misma por su propio pie con el resto de la cuadrilla.
El diestro Paco Ureña resultó este domingo herido por asta de toro mientras lidiaba a su segundo en la corrida de Tafalla. El torero que había sufrido en su primero ya un primer revolcón, fue cogido hasta en dos ocasiones más en su segundo toro.
El diestro Paco Ureña resultó este domingo herido por asta de toro mientras lidiaba a su segundo en la corrida de Tafalla. El torero que había sufrido en su primero ya un primer revolcón, fue cogido hasta en dos ocasiones más en su segundo toro.
En la primera de ellas recibió una fuerte contusión en el muslo derecho, que incluso dejó un agujero en el pantalón de su traje de luces.
En el segundo de los encuentros con el animal, sufrió una cornada de 6 centímetros a la altura de la cadera derecha.
Nada más acabar con su segundo toro, tomó el camino de la enfermería y ni siquiera pudo pasear su oreja, que fue la única que se cortó en la tarde.
Ya en la enfermería, el cirujano Berly Núñez, tuvo que atenderle de la contusión en el muslo derecho, pero sobretodo de la cornada de 6 centímetros de la cadera.
Los médicos limpiaron la herida, procedieron a su desinfectación y posteriormente se suturó.
El torero, minutos después abandonaba por su propio pie la enfermería y enfilaba camino a Sevilla en la camioneta de la cuadrilla.
En el segundo de los encuentros con el animal, sufrió una cornada de 6 centímetros a la altura de la cadera derecha.
Nada más acabar con su segundo toro, tomó el camino de la enfermería y ni siquiera pudo pasear su oreja, que fue la única que se cortó en la tarde.
Ya en la enfermería, el cirujano Berly Núñez, tuvo que atenderle de la contusión en el muslo derecho, pero sobretodo de la cornada de 6 centímetros de la cadera.
Los médicos limpiaron la herida, procedieron a su desinfectación y posteriormente se suturó.
El torero, minutos después abandonaba por su propio pie la enfermería y enfilaba camino a Sevilla en la camioneta de la cuadrilla.
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